Estamos inexplicablemente cansados, sin ganas de hacer nada, con pocos estímulos, dolor de cabeza y malestar general… Nos sentimos mal pero no sabemos por qué… La respuesta es que la envidia siempre está y nos afecta, aunque sea muy difícil detectar su origen.
El mal de ojo, la energía negativa, los celos y los rencores existen… Muchas veces nos alcanzan y, en alguna medida, nos “dañan”.
“Si la envidia fuera tiña… ¡Cuántos tiñosos habría!”, dice la conocida frase. Y no se equivoca.
Inevitablemente esto es así. De hecho, ¿a quién no le gustaría que este sentimiento se pudiera “materializar” para verlo con nuestros ojos y saber de qué persona nos llega y cómo nos afecta?
Si bien eso es imposible, lo sabemos, afortunadamente existe un ritual que puede ayudarnos a neutralizarla. Veamos.
De acuerdo al esoterismo y el mundo de la magia, el hielo puede tener diferentes significados y simbolismos.
Puede significar purificación y limpieza de energías negativas; puede representar transformación y cambio; puede emplearse en rituales para superar obstáculos; y puede simbolizar fuerza y resistencia en tanto es capaz de soportar altas presiones y temperaturas extremas.
En algunas culturas orientales, es el ejemplo de introspección y calma pues se asocia con la meditación y la reflexión, por su apariencia tranquila, serena y fría.
Y para la mitología nórdica indica conexión con la sabiduría divina y los dioses.
En este caso, tomaremos su función purificadora y lo haremos con una simple práctica.
Es que existe un ritual que nos puede ayudar a convertir en un frío bloque todos esos sentimientos negativos que pensamos que nos afectan al momento de atraer la prosperidad y la buena suerte, detalla laopinion.com.
Ya en la más remota antiguedad se creía que el hielo funcionaba como un potente neutralizador de envidias y negatividad y que tenía propiedades mágicas.
Par hacer este ritual necesitaremos:
Primero, debemos enfocarnos en nuestros malestares, en todo lo que nos afecta o visualizamos a todas esas personas que creemos que nos envidian y nos tiran malas vibras.
Luego, describe el portal mencionado, tenemos que escribir en el papel todos los sentimientos negativos que percibimos tienen hacia nosotros: celos, envidia, odio, desamor, etc.
En este caso, no hay que poner nombres de personas, ya que el objetivo es neutralizar las malas energías, no a alguien en específico.
Cuando terminamos de escribir lo que sentimos, doblamos el papel lo más pequeño posible, lo ponemos dentro del recipiente plástico, lo cubrimos con agua y lo guardamos en el freezer o el congelador.
Lo dejamos allí hasta que la envidia y lo negativo que recibíamos desaparece. Entonces, sacamos el recipiente y extraemos el bloque de hielo con el papel congelado y y lo tiramos en el inodoro.
Este ritual también sirve para contrarrestar inseguridades personales, advierte laopinion.com. En este caso, debemos hacer el mismo procedimiento pero en el papel escribimos palabras como sensación de fracaso, frustración, nerviosismo, carga negativa, etc.