La noticia parece vieja, pero es nueva: Zak Starkey dejó de ser el baterista de la legendaria banda The Who, tal como había sucedido un mes atrás. En el medio, lo recontrataron y ahora lo acaban de despedir nuevamente, justo antes que el grupo inicie su gira de despedida, tras casi 60 años de carrera. La noticia se hizo pública en redes sociales, primero por el guitarrista Pete Townshend, y luego fue confirmada por un Starkey visiblemente disgustado.
Zak Starkey dijo que le habían pedido que dijera que esta vez renunciaba por voluntad propia en lugar de ser despedido, pero “sería mentira. Amo a The Who y nunca habría renunciado”, escribió, en su versión de lo que sucedió en medio de “esta locura”.
Pete Townshend dio la noticia en un texto publicado como superposición a una foto en su cuenta de Instagram: “Después de muchos años de excelente trabajo con la batería por parte de Zak, ha llegado el momento de un cambio. Un momento conmovedor. Zak tiene muchos proyectos nuevos entre manos y le deseo lo mejor”.
El famoso rockero de 80 años también usó la publicación para anunciar al baterista actual: “Scott Devours, quien trabajó con la banda solista de Roger (Daltrey), se unirá a The Who para nuestros conciertos finales. Denle la bienvenida”.
Como respuesta, Starkey escribió: “Me despidieron dos semanas después de mi reincorporación y me pidieron que declarara que había renunciado a The Who para dedicarme a mis otros proyectos musicales; eso sería mentira. Amo a The Who y nunca lo habría renunciado. Así que no lo dije… Renunciar a The Who también habría decepcionado a las innumerables personas increíbles que me apoyaron (muchísimas gracias a todos) durante las semanas de caos en las que estuve entrando y saliendo, entrando y saliendo, entrando y saliendo como un gurú”.
El primer despido del hijo de Ringo Starr había sido después de que la banda ofreciera conciertos benéficos de Teenage Cancer Trust en marzo en el Royal Albert Hall de Londres, durante los cuales el cantante Roger Daltrey se mostró descontento con el desarrollo de algunos momentos del show. Sin embargo resucitó tres días después, con un posteo de Townshend: “¡Noticia de último momento! No se le pidió a Zak que renuncie a The Who. Hubo algunos problemas de comunicación, tanto personales como privados, que debían resolverse, y se han resuelto con alegría”.
Las reacciones de los fans ante la última publicación de Townshend en Instagram fueron decididamente diversas. Algunos dijeron que no concebían la encarnación moderna de The Who sin Starkey; otros afirmaron que su sustituto, Devours, es un baterista de gran talento que hizo un excelente trabajo en etapas anteriores cuando fue llamado a sustituir a Starkey.
El final de Zak en The Who es el segundo despido de un baterista suplente de alto perfil en poco tiempo, tras el reciente despido de Josh Freese como baterista de Foo Fighters, aunque la permanencia de Freese en ese grupo se midió en meses y no en las décadas que Starkey pasó sustituyendo a Keith Moon. De hecho, inmediatamente surgieron comentarios entre los fanáticos (algunos jocosos, otros serios) de que Starkey podría ser el candidato para reemplazar a Freese en los Foos.
Y tal como prometió la semana pasada, Freese se lo tomó con humor y compartió una lista cómica de las 10 posibles razones por las que podría haber sido despedido de la banda, ninguna de las cuales parece demasiado realista.
Freese anunció su despido, aparentemente sin contemplaciones, el jueves pasado, compartiendo que la banda lo hizo con una de las explicaciones más crueles del mundo laboral: que habían decidido “tomar un rumbo diferente”, y añadió: “No se dio ninguna razón”.
Los representantes de la banda no ofrecieron explicaciones ni detalles, pero musicalmente hablando, la expresión “dirección diferente” resulta casi cómica, ya que Freese es uno de los bateristas más versátiles del rock, con trabajos que van desde Sting hasta Guns N’ Roses, desde Nine Inch Nails hasta Weezer, y en Coachella de 2023 tocó con 1000 Gecs y Danny Elfman, el mismo día.
Por lo tanto, no sorprende que Freese dijera estar “sorprendido y decepcionado” por la decisión, aunque concluyó diciendo: “Estén atentos a mi lista de las 10 posibles razones por las que Josh fue expulsado de Foo Fighters”.
La lista, que va desde “Una vez silbé My Hero [el éxito de los Foo Fighters] durante una semana entera de gira”, “Nunca intenté dejarme barba” y que solo podía nombrar una canción de Fugazi, el ídolo de Grohl, son solo tres puntos destacados, junto con una broma sobre su promesa a Noodles, su antiguo compañero de banda en Offspring, de ser el cuarto guitarrista de los Foo Fighters. (“¡Pero lo prometiste!”, bromeó Noodles en los comentarios).
Tras meses de especulaciones, Freese se había unido oficialmente a la banda en mayo de 2023 y parecía que su futuro sería largo, ya que la banda giraba sin parar tras el repentino fallecimiento de su baterista Taylor Hawkins (también en una gira, por Sudamérica). Los Foos mantuvieron un perfil relativamente bajo en los últimos meses y sólo tienen un concierto programado: una fecha en Singapur en octubre.
Quién estará tras los parches es una incógnita.