Ignacio Vázquez, el capitán de Platense, y la fuerte arenga que prepara para motivar a sus compañeros en el túnel antes de la final contra Huracán

No surgió de Platense, pero se ganó el corazón de los hinchas del Calamar con personalidad, entrega y convicción. Ignacio Vázquez es de esos líderes que no necesitan levantar la voz para hacerse escuchar. Firme, temperamental, con un largo recorrido que incluye pasos por All Boys, Belgrano, Cerro Largo y San Luis, vive un gran presente como capitán de uno de los finalistas del Torneo Apertura. Con 27 años, y tras varios préstamos que lo forjaron, encontró en Vicente López su lugar en el mundo.

Alcanza con una imagen para entender a Nacho Vázquez: cuando eligió no mirar al árbitro Yael Falcón Pérez antes de la definición por penales frente a River porque desbordaba de bronca. Un gesto que se volvió viral y que resume su esencia. Este domingo puede convertirse en el primer futbolista en la historia de Platense en levantar una copa. Un sueño que lo emociona y lo impulsa. A horas del choque con Huracán en Santiago del Estero, el capitán calamar habló con Clarín.

-¿Qué imágenes te vienen a la mente en la previa de esta final?

-Cuando tomaba un colectivo o un tren para ir entrenarme, cuando me llevaba mi vieja embarazada, cuando mi viejo no tenía para el colectivo y me daba la plata mi abuelo. Hoy le devuelvo todo a mi viejo. Soy un agradecido a él y a mi vieja. Cuando ellos no tienen, los ayudo. Los llevo a casa a dormir. Voy a poner una camioneta para que toda mi familia a viaje Santiago. Les quiero devolver todo el cariño que me dieron. Por eso, me llevo más o menos 20 personas para la final. Son los que están siempre. No los puedo dejar afuera porque siempre que juego de local vienen. Son los que ponen el pecho cuando las cosas te salen mal. Son los que lloran al lado tuyo. A mi vieja la vi llorar al lado mío. Son cosas que te quedan en la vida… Como cuando mi viejo, un luchador, se iba a las seis de la mañana y volvía a las seis de la tarde y ganaba dos pesos. Entonces, por todas estas cosas, yo le trato de devolver a ellos todo el cariño que me dan.

-¿Qué significa para vos llegar a otra final con Platense?

-Son momentos lindos en el fútbol que no pasan siempre. Por suerte, me tocó estar en la final del 2023. La perdimos, pero hoy nuevamente estamos en otra final. Lo único que quiero es salir campeón. Nunca lo fui, va a ser algo lindo para mi carrera y, como se lo dije a los chicos, podemos quedar en la historia del club.

-¿Lo sentís como una revancha?

-No sé si es una revancha, porque para mí revancha es el mismo equipo. Para mí revancha es cuando vas a jugar con Rosario Central y tenés el mismo equipo a tu lado. Hoy tengo otro equipo acá: vamos a enfrentar a otro gran rival como es Huracán, pero nosotros estamos tranquilos, vamos a ir a hacer el trabajo que venimos haciendo estos días.

-¿Por qué dijiste que ustedes tienen más hambre de gloria que los jugadores de otros equipos?

-Por lo que vivimos en el día a día… A veces nos cuesta mucho. La verdad es que estos muchachos se entregan al máximo. Va a ser un partido muy difícil, pero yo creo que estos muchachos me van a dar la alegría que tanto quiero para mi vida y para el grupo. Va a ser muy lindo.

-¿Cuál fue el peor momento del equipo?

-Puede ser, capaz, el partido con River. Pensé que se me iba todo, que lo perdíamos. Fue una falta de respeto hacia el club. Este fue el único momento malo que yo pasé acá en el club, los demás son todos momentos hermosos.

-A pesar de los fallos arbitrales se mantuvieron firmes aquella noche. ¿La mentalidad es la gran fortaleza de este grupo?

-Doy las gracias a Dios que los chicos no estaban como yo. Estaban tranquilos. Yo estaba muy pero muy nervioso. Estaba loco. No sabía lo que iba a pasar si quedábamos afuera. Yo lo hablaba con mi señora y con los chicos. Iba a ser muy difícil para mí si quedábamos afuera en ese partido. No sé lo que iba a pasar, pero los chicos me tranquilizaron.

-¿Por qué no sabías lo que iba a pasar?

-Sabía que si pasábamos ese partido íbamos a llegar a la final. Vos fijate: si nosotros perdíamos por penales, hoy no estábamos en una final. Nadie estaría hablando de nosotros y el hincha estaba tan ilusionado como nosotros. Ese partido era nuestro… Merecimos ganar los tres partidos, no merecimos ir a penales con River. Son cosas que pasan en el fútbol que no deberían pasar. Pero, somos seres humanos, tenemos errores… Como yo me equivoco en un pase o cuando erro un centro.

-¿Sentis que al final hubo justicia deportiva?

Si. Nos daban por muertos y estamos en una final. Soy un agradecido al fútbol, a la vida, a estos chicos que me llevan de vuelta a una final acá en el club. Hoy venía pensando que puedo quedar en la historia del club, puedo levantar una copa; ¿Cómo debe ser levantar una copa? La vida te puede cambiar. Ojalá podamos coronar, sería muy lindo.

-¿Cuáles crees que van a ser las claves del partido?

-Huracán tiene muchos jugadores buenos. Yo creo que las claves van a estar por las bandas como lo hicimos con River. Creo que Walter Mazzanti está en un buen nivel. Por eso, nosotros con Oscar Salomón, tenemos que estar firmes abajo. Después tenemos grandes jugadores de jerarquía arriba. No sé si de jerarquía, pero sí de nombre. En estos días se está hablando mucho de ellos.

-¿Les molesta que siempre pongan de favorito al equipo rival?

-Me da bronca que no hablen de Platense. No porque estemos en una final ahora, sino por lo que venimos haciendo hace varios años. Desde que estoy en el club hemos llegado a una final, estuvimos a un punto de clasificar para una copa, hoy estamos en una final nuevamente. Me jode que no se hable de Platense porque la dirigencia viene haciendo las cosas bien durante años. Sabemos que somos un club humilde, pero yo creo que después de esta final se va a empezar a hablar mucho más de Platense.

-¿Sentís el apoyo de los hinchas de otros clubes?

-Siento que la gente nos apoya por los siete mil mensajes que tengo en mi teléfono. Me llaman hinchas de Boca, River, Racing, Independiente… La verdad que soy un agradecido porque te apoyan. Hicimos una gran campaña que fue dejar afuera a tres grandes. No me voy a olvidar nunca de este momento tan lindo.

-¿Cómo te imaginás la arenga el domingo antes de salir a la cancha?

-Yo no hablo en la arenga, lo dejo a Guido Mainero. Yo hablo en el túnel. Ahí, los junto a todos y le digo que va a ser una batalla. Si no ganamos vamos a perder a nuestras madres. Ese va a ser el mensaje. Va a ser algo que les llegue a ellos, algo único. Sabemos que si no ganamos ese partido vamos a perder a un familiar. Entonces tenemos que estar metidos. Ese es el mensaje, el sentimiento… Ellos van a tener que luchar, salir a ganar. Es una final única. Podemos quedar en la historia del club, en el mural del club. Sabemos que tenemos que batallar y que tenemos que defender a nuestra madre como nunca.