Las sentadillas son un ejercicio simple y muy efectivo. No requieren equipamiento y se pueden hacer en casi cualquier lugar, lo que las convierte en una excelente opción para mantenerse activo de manera accesible.
Al trabajar piernas, glúteos y abdomen, fortalecen la musculatura, mejoran la postura y ayudan a quemar calorías. Además, si se realizan correctamente protegen las rodillas y los tobillos, lo que contribuye a prevenir lesiones y ganar estabilidad.
Para quienes buscan aumentar los glúteos, la clave está en la constancia: sumar repeticiones de forma progresiva, cuidando la técnica, es esencial para lograr resultados visibles y evitar molestias o lesiones.
Lo cierto es que, ya sea como parte de un entrenamiento completo o como pausa activa durante el día, las sentadillas son una excelente herramienta para tonificar el cuerpo y mejorar el bienestar físico general.
Según el portal especializado Su Médico, las sentadillas son uno de los ejercicios más eficaces para fortalecer el tren inferior, en especial los glúteos y los muslos. Sin embargo, para notar cambios reales, no solo importa hacerlas: es clave realizarlas con constancia y en la cantidad adecuada.
Si el objetivo es aumentar el volumen de los glúteos, los especialistas aconsejan unas 50 sentadillas al día. La cifra puede parecer elevada, pero no es necesario hacerlas todas de una vez: se pueden dividir en series a lo largo del día. Para quienes recién comienzan, es ideal arrancar con 15 repeticiones diarias e ir subiendo progresivamente.
Si no se cuenta con mucho tiempo o se está empezando desde cero, también es posible optar por rutinas más cortas, entre 3 y 4 veces por semana, con el mismo número de repeticiones.
Eso sí, más allá de la cantidad, lo que verdaderamente marca la diferencia es la técnica. Hacer muchas sentadillas con mala postura no solo resta efectividad, sino que puede provocar molestias o lesiones.
El sitio Men´s Health recomienda:
- Colocar la espalda recta y el abdomen firme
- Separar los pies a la altura de las caderas y apuntar los dedos hacia adelante
- Bajar los glúteos hasta formar un ángulo de 90°, sin que las rodillas sobrepasen los dedos de los pies
- Subir empujando desde los talones para activar bien los glúteos
- Mantener la mirada al frente y los hombros hacia atrás durante todo el movimiento
- Para potenciar los resultados, se puede incorporar peso de forma progresiva, siempre cuidando la postura
Como dijimos, las sentadillas no solo ayuda a modelar los glúteos. Según diversas fuentes, como Medical News Today, realizar este ejercicio de manera habitual contribuye a:
- Fortalecer las piernas, rodillas y tobillos
- Proteger articulaciones y prevenir lesiones
- Mejorar la densidad ósea
- Quemar calorías y reducir grasa corporal
- Fortalecer la espalda baja y mejorar la postura
- Aumentar la flexibilidad en la zona inferior del cuerpo