La eliminación de Estudiantes ante Aldosivi en la Copa Argentina puede traer consecuencias. La conferencia de prensa que brindó Eduardo Domínguez dejó abierta su puerta de salida. ¿El técnico busca una reacción de los jugadores, que no respondieron en el Torneo Apertura y muy a pesar de la clasificación a los octavos de final de la Libertadores? ¿O el tiro por elevación fue para la dirigencia, encabezada por Juan Sebastián Verón?
“Antes de hablar de refuerzos, tengo que pensar y hablar con Marcos sobre mi continuidad. Hay cosas que pasaron que no me gustaron y que no son claras. Cuando las cosas son confusas, se empieza a confundir mucha gente”, sostuvo Domínguez en referencia a Angeleri, el manager del club.
La respuesta de Domínguez llegó a partir de la pregunta de un colega sobre la posible repatriación de Joaquín Correa, cada vez más relegado en la consideración de Simone Inzaghi en el Inter.
“Tengo tres maneras de irme de un club: por malos resultados y desgaste con el grupo, porque me dicen una cosa y hacen otra, o porque buscamos cosas diferentes para el futuro. Una de esas tres está pasando”, enfatizó el entrenador de 46 años.
“Estamos con mucha bronca. Creo que empezamos el partido bien, teníamos la pelota, presionábamos. Pero erramos dos pases y nos perdimos. Después del empate dejamos de jugar, todo fue esporádico y apurado“, analizó el técnico.
El entrenador también hizo un balance del semestre, en el que el León compitió en tres frentes: Torneo Apertura, Copa Libertadores y Copa Argentina. “Durante el semestre hicimos un torneo que no fue bueno ni malo. Una Copa Libertadores muy buena. Tuvimos una Copa Argentina mala, porque en Santa Fe clasificamos de manera agónica, y hoy quedamos afuera”, puntualizó.
Domínguez, además, habló de la seguidilla de partidos y algunas cuestiones internas. “Cuando empezamos la doble competencia, bajamos mucho. Más allá de la forma, si pasábamos hoy, era un buen semestre. Lamentablemente no se pudo”, aseguró.
Y se refirió a los hinchas: “La gente está dolida y lo entendemos. Todo el foco de este semestre se fue a la Copa Libertadores. La gente lo pide así porque ya fuimos campeones dos veces de copas nacionales”. Y volvió a hablar sobre un posible final de su ciclo: “Si no coincidimos en situaciones, va a haber una incomodidad que no vale la pena vivir. Hay que pensar”.
Con 131 partidos dirigidos (57 ganados, 41 empatados y 33 perdidos), un 53,9% de eficacia y 3 títulos, este domingo dio la sensación de que el 1 a 1 ante Aldosivi, que consagró al equipo marplatense en los penales, podría ser su despedida.