Falta mucho para la Copa Libertadores, algo menos para defender el título en el Torneo Clausura, pero en Platense el martes se cierra el paréntesis que el presidente del club, Sebastián Ordoñez, abrió antes de la final de Santiago del Estero para enfocarse exclusivamente en el partido ante Huracán. Ahora volverá inmiscuirse en la tarea de balancear el presupuesto y evitar que todos los campeones cambien de camiseta.
“Si, me llamaron para pedirme condiciones de venta de algunos futbolistas y supe del interés de otros. Ustedes también publican que hay clubes que quieren jugadores nuestros”, admitió todavía en Santiago del Estero Ordoñez, como resignado.
Por eso pateó las conversaciones para esta semana. Lo hizo cuando ser campeón era una posibilidad. Con el título consumado, cuando retome conversaciones, sabe que ahora sus jugadores valen más. Por la misma razón, es conciente que también deberá mejorar los contratos de aquellos que quiera retener y por todos esos motivos, asume -aunque no lo reconozca- que algunos de los que dieron la vuelta, ya no estarán en el próximo partido cuando el Calamar vuelva a salir a la cancha.
“Hablé con los jugadores antes de la final y les pedí que nos enfocáramos en el partido. Que sabía de las ofertas que les estaban llegando, pero que había tiempo para analizarlas después”, explicó. Y “después” es a partir del martes.
“Toda mi familia es de Racing, mi hija se llamaba Valentina Celeste. El día que me toque ir a Racing, ojalá sea, lo voy a disfrutar. Y sino, a seguir trabajando”, dijo sin eufemismos -y antes del martes- el capitán Ignacio Vázquez.
El defensor que le sacó la vista al árbitro Yael Falcón Pérez el día que acumuló desaciertos que favorecieron a River, también estaría en los planes de Boca. Para que siga, deberían ofrecerle un sueldo acorde al interés que despierta, pero tal vez el futbolista valore más un nuevo desafío, que una mejora salarial.
El paraguayo Ronaldo Martinez es por quien más preguntan. El goleador tiene contrato hasta el final de 2026 y ya jugó dos finales con el Calamar. En el club saben que será difícil retenerlo y tiene un recorrido que puede considerarse un ciclo completo.
“Ya veremos que pasa. Hay jugadores que son buscados, vamos a tener oportunidades y sabemos que algunos se van a ir. Si tiene que ser, que sea y el que se tenga que quedar, se va a quedar”, analizó Ordoñez.
El interés no está solo puesto en los que hacen goles: también quienes lo evitan. El arquero Juan Pablo Cozzani tuvo una temporada muy regular con pocos goles en contra y eso cotizó su pase como nunca. Tiene contrato hasta 2028, pero en el club aunque la intención es retener, el propósito es también el ingreso de dinero.
Para cada campeonato, Platense repitió un modus operandi. Busca el perfil del jugador pretendido en aquellos futbolistas que hayan mostrado un buen pico de rendimiento y se encuentren en un bajón. Así llegaron muchos que encontraron en el Calamar el espacio para potenciarse y recuperar el nivel.
Una vez que en el Marrón equilibran su potencial, se les abre la posibilidad de pegar un salto en su carrera. Platense no es una mera vidriera, es la contraparte necesaria que saca rédito: así ascendió, luego jugó su primera final tras recuperar la categoría y, como para confirmar el método, también fue campéon de Primera.
“Soy un loco que piensa a futuro. Mi mujer o mis amigos me dicen ‘pará un poco’, pero es que si en el fútbol parás, te pasan por arriba. Mientras estabamos disfrutando la final, estábamos sentados con otros dirigentes a ver dónde hacemos la pretemporada y en el próximo equipo”, detalló Ordoñez.
Y la salida de varios jugadores, no será la primera vez que pase. De los finalistas del equipo de Martín Palermo en 2023, solo cinco repitieron con la dupla que conforman Favio Orsi y Sergio Gómez en Santiago del Estero.
Aunque en el club no quieren “avivar giles”, Leonel Picco es otro de los más reclamados y por Vicente Taborda no hay chances: deberá volver a Boca cuando termine el préstamo. Guido Mainero, quien quedará eternizado por el gol del campeonato, termina su contrato en diciembre y el primero de los jugadores que comenzará a negociar su continuidad.
Por todos contesta y dialoga Ordoñez. “Es que es un club que es muy dependiente de los directivos todavía. Nos falta crear las estructuras medias de mando para delegar un poco las funciones del día a día”, cierra el presidente que, en paralelo, también escucha ofertas de nuevos auspicios. Desde que es campeón, todos quieren jugadores de Platense.