Una mujer de 28 años murió horas después de someterse a una cirugía estética. La joven había viajado a Miami para operarse en una clínica especializada, pero luego de la cirugía se descompensó y falleció.
La operación se realizó el 5 de marzo y ahora la noticia se hizo viral tras la difusión de la causa judicial que se lleva adelante.
Según informes, Ahmonique Miller viajó con su hermana Kiera Barnes y planeaban someterse a procedimientos cosméticos en Avana Plastic. Miller se sometió a un levantamiento de glúteos, un procedimiento en el que se transfiere grasa de otras zonas del cuerpo a los glúteos, y a una liposucción
Luego de la intervención, Miller fue trasladada a una habitación común de la clínica para transitar el posoperatorio. Allí fue hallada por su hermana “fría” y en la misma posición que se había dormido.
Tras llamar a emergencias, la mujer fue declarada muerta en el lugar. Estaba vendada con fuerza y acostada boca abajo en la cama. Según la autopsia, le habían recetado medicamentos y relajantes musculares que fueron letales. El informe médico señaló que el uso combinado de ambos fármacos “afecta la respiración y aumenta el riesgo de muerte durante el sueño”.
El portavoz de la policía de Miami, el oficial Mike Vegas, dijo a Local 10 News que la unidad de homicidios del departamento está investigando la muerte.
Ahmonique era madre de una niña de un año, dirigía dos pequeños negocios en Las Vegas y tenía aspiraciones como artista musical, según reveló su madre, quien criticó la falta de regulación sobre estos centros médicos.
Una liposucción es una intervención que consiste en retirar los excedentes adiposos de determinadas aéreas del cuerpo. Existen diferentes métodos a través de los cuales se puede remover esta grasa: la lipoaspiración convencional -que consiste en colocar unas cánulas que rompen y extraen la grasa-, la lipoaspiración con láser -para la cual se pasa una fibra óptica en la región para transformar la grasa en aceite y luego se extrae con cánulas- y, por último, existe la lipoaspiración ultrasónica -donde se utiliza el ultrasonido para licuar la grasa y se extrae con cánulas más finas-.
Entre los riesgos principales se encuentran la aparición de hematomas o asimetrías, mientras que las complicaciones más graves son la embolia grasa, que se produce por un micro trauma en los vasos sanguíneos, la grasa migra a través del vaso traumatizado y hace la embolia en algún sector.
Estos son los casos en los que el riesgo puede ser mortal, aunque los especialistas advierten que los principales problemas se dan cuando se hacen en consultorios (está prohibido) o sin los elementos necesarios.